Reinventar la manera de diseñar, indagando en la arquitectura tradicional mallorquina con una mirada innovadora en el uso de materiales locales. Encontrar un equilibrio con el paisaje y una casa de nueva construcción, mimetizando colores con materiales y texturas ya presentes en los alrededores. Crear espacios que propicien las relaciones, potenciando lugares que nos despierten la necesidad de habitarlos y vivirlos.
La casa de Can Roig, se ubica cerca del pueblo de Cas Concos, al sureste de la isla, un pueblo de interior y arquitectura tradicional que mantiene un entorno natural envidiable y a escasos kilómetros de una costa plagada de playas azul turquesa.
Nuestro objetivo inicial fue conectar con los elementos naturales de Mallorca, del interior de la isla, con sus orígenes. Materiales desde su estado más salvaje hasta aquellos trabajados durante siglos por generaciones de mallorquines. Poner en valor sus colores, sus texturas y su manera de modelarlos.
La búsqueda de una cromática que partiera de los materiales en su estado natural encontrando un equilibrio con su entorno.
Uno de los retos de este proyecto ha sido combinar la mirada innovadora y sostenible en el diseño, y entrelazarla armónicamente con la tradicional arquitectura mallorquina.
Para su construcción se utilizó pintura de cal para los muros, una elección eco-amigable que promueve la transpirabilidad y la salud del espacio interior. Asimismo, al dar prioridad a los recursos locales, hemos seleccionado piedra local con trozo irregulares que provienen de los restos de corte que normalmente se desechan en la mayoría de canteras para el pavimento exterior y del hall. En las paredes interiores de piedra vista y fachada se empleó la piedra propia del terreno, propiciando un incuestionable diálogo con el entorno y contribuyendo a la disminución de la emisión de CO2 causada por el transporte de materiales. De esta manera, al trabajar de la mano con la naturaleza circundante, se logró una total integración de la casa con la envolvente paisajística del sureste mallorquín, donde lo natural enriquece lo construido y viceversa.
Proyecto de interiorismo
Distribución